Ahora que nos contamos

Vivimos un momento único para el cuento. La blogosfera nos acerca y cada vez somos más los que participamos en esta vorágine de lecturas. Nos leemos y comentamos. Aquí encontrarás textos para la reflexión y mentiras, muchas mentiras adornadas de realidad...

También he querido hacer mi pequeño homenaje a esos autores a los que tanto debemos, su influencia pesa sobre nosotros y nos hace crecer.

Puedes participar con tus comentarios si lo deseas porque, ahora que nos contamos tantos cuentos..., es el momento.

Espero que el resultado valga la pena y que te sientas a gusto entre estas páginas.

27/11/13

Resaca




 Se tomó la ginebra de un trago y salió del local tambaleándose. Todavía conservaba un buen cuerpo, aunque el dolor se reflejaba en cada surco de su cara y la inocencia hacía mucho tiempo que la había perdido. Ya solo le quedaba la supervivencia y por eso no podía con su vida.
Atrás quedaron las tardes de risas, las confesiones, el escalofrío de su piel al encontrar algo inesperado y sorprendente, ya nada lo era. Había perdido y se sentía tan pequeña que no sabía salir de aquella vorágine. Una y mil veces se decía que aquello no era la solución y que mañana estaría mucho peor, el dolor se haría  más intenso, pero carecía de la fuerza necesaria para ponerle freno. Ni siquiera los consejos de quien tenía cerca, de quienes más la querían pudieron apartarla de aquel dolor en el que día tras día se sumergía sin saber ya ni por qué.
Yo la vi, pero ella no me reconoció, aquella noche estaba tan borracha que dudo que hubiera conocido a nadie.
Fotografía: Paola Peinado

Sin embargo, soy consciente de que a la luz del nuevo día se sintió tan defraudada de sí misma que pensó que ya era tarde para cualquier cambio. Su vida ya nunca más sería suya, sino la que vivió por el miedo a tener otra, la verdadera, la de verdad. Si alguna vez conoció la traición, pensó, nunca esta fue tan dolorosa como la que acababa de descubrir en aquel momento, el dolor más grande era saberse traicionada por ella misma. Ya no podía seguir fingiendo, ya no sabía quién era, y sobre todo, quién había sido, porque en aquel momento al mirarse al espejo encontró a alguien que no conocía, que durante mucho tiempo tuvo escondida y que ahora se mostraba tal cual, se encontró con ella.

Por fin me vio y juntas encontramos la salida.

4/11/13

Somos eternos



Nos creímos eternos y durante un tiempo lo fuimos. Pero aquello terminó. Yo quería una nueva vida, quería conocer, saborear, descubrir, buscar, experimentar, VOLAR…Todo se me hacía pequeño y todo era mediocre, mis ansias de búsqueda me hicieron salir a vivir y tú… Te quedaste ahí, donde por algún tiempo estuvo bien, pero que ya no tenía ningún sentido seguir. Te quedaste, no sé si esperando que yo volviera a tu lado o si con la idea de que ya no volvería nunca. Jamás pude entenderte y mucho menos saber cuáles eran tus pensamientos. Y ahí quedó, aquello que pudo ser no terminó y cuando ya pensaba que nunca más te volvería a ver, me encontré de nuevo contigo. Recuerdo que aquella mañana hacía frío, y que al acercarte a mí las piernas me temblaron. Me saludaste sin mucha emoción, no como hubiera imaginado que sería nuestro encuentro después de tanto tiempo, y  percibí el anillo. Era eso, estabas casado, lo nuestro había quedado en un remoto olvido, lógico, ¡por qué iba a ser de otra manera!, cada uno empezó una nueva vida. Sin embargo, ¿por qué me sentí mal? Yo jamás hubiera podido tener la vida que tú llevabas y tú no hubieras sido feliz sin aquella estabilidad. Éramos  completamente diferentes, aunque… ¡Por qué no! Me dije. Te invité a subir a mi casa y después de tanto tiempo sé que fue emocionante para los dos. Desde entonces no te he vuelto a ver, quizá sea mejor así, complicaríamos demasiado  las cosas, seguro, pero a veces sigo pensando en aquel tiempo.

Camino despacio, no tengo prisa, mi tiempo, ahora lánguido, se me hace insoportable. Los recuerdos se atropellan en mi cerebro y mis pasos me guían hacia, ya no sé dónde. Creí haber  encontrado el rumbo hace tiempo, pero después de volver a verte todo se ha vuelto de nuevo del revés. Había perdido los detalles de tu cara, por más que mi mente lo intentaba no conseguía perfilar tu rostro con exactitud. Todos estos años he vivido haciéndome creer que te había olvidado, no significabas nada para mí, así lo quise y te arranqué de mi vida. Te fuiste de mi lado y yo te quise olvidar. Por algún tiempo creí haberlo conseguido, pero me di cuenta de que todo era mentira cuando nos volvimos a ver. No sé si será posible volver a estar juntos. Sigo pensando…